¿Un triángulo amoroso? Piénsalo dos veces...
En un trío amoroso, ¿cuántas parejas hay? Pueden ser dos o tres si se comparten entre ellos, ¿verdad?
Pues te voy a decir por qué este tipo de relaciones no son compatibles con nuestro proceder normal.
En primer lugar, nuestro cerebro no puede estar en disonancia cognitiva ni emocional. Si tienes que esconder tu relación, entonces tu cerebro no será congruente con su vida normal. Sentirá un vacío enorme al tratar de actuar con naturalidad en casa, pero fuera de ella te transformará en un ser pasional.
Basta que se nos diga que “no” a algo y más lo vamos a querer, sobre todo con una necesidad primaria como el impulso de reproducción, aunque ese no sea el fin definitivo. Pero si es el medio al que nos apegamos tanto, pues casi no hay animales en la tierra que forniquen por placer.
Cuando la palabra no es inculcada en el cerebro como parte del speech del matrimonio, ahí empieza la ansiedad. Por eso, hoy en día hay menos matrimonios, ya que su fin es proteger la monotonía.
Si has decidido casarte o vivir con una sola persona, sé sincero contigo mismo, pon en una balanza la elección y haz un análisis FODA de todos los puntos antes de dar el gran paso, para que después no sobre un tercero.
Pero si te es posible, cásate o vive con alguien por amor. No hay otra razón en este mundo suficientemente buena como el amor; y no me refiero al pasional, al de los primeros meses de relación, sino al amor profundo que implica respeto, admiración y comprensión de los detalles que más adelante podrían ser una molestia.
Es vital reconocer la capacidad del otro y ser su compañero o compañera para seguir creciendo, no para competir. Si te casas por cualquier otra razón, esa decisión se dirigirá al fracaso porque, si bien ganarás experiencia, nunca hubo cimientos allí. Cabe resaltar que el enamoramiento no es amor, así que un consejo: cuando sientas mariposas en el estómago, es mejor no tomar la decisión aún.
El enamoramiento, paradójicamente, es lo que buscamos al envolvernos con alguien debido a las mismas rutinas y conversaciones, por ejemplo. Claro, una persona atractiva nueva te dará todo eso y más, pero será efímero.
Si te casaste por amor, la lógica o la racionalidad puede más que lo irracional, que puede ser complaciente al inicio, pero no podrás lidiar con tu doble vida mucho tiempo. Tu cerebro se confundirá, cometerás errores, te descubrirán y saldrás destrozado, pues allí nadie pierde más que tú.
Piénsalo, 2+1=3. Pero ese uno está demás; es una sumatoría equivocada. Mejor procede con el simple 1+1=2. Si la siguiente variable hace que busques otra pareja debido a la falta de amor, siempre mejor un divorcio conciliatorio que uno engorroso.
Toma la decisión correcta. Acaso, ¿por un momento de placer arruinarás tu vida? Piénsalo, analízalo y conversémoslo.
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